No recuerdo una entrega de premios tan predecible y condescendiente como la de anoche. Gano quien suponíamos que iba a ganar y con excepción de dos premios, el resto de los ganadores fueron pronósticos imaginables.
Fue una entrega de premios diferente, sin host, como no se veía en 20 años y con mucha polémica por categorías que no fueron, categorias que iban a entregarse durante la pausa publicitarias pero no, un posible host homofobicos y nominaciones para limpiar la vergüenza de los Oscars So White del 2015. Este año la Academia tuvo mas idas y vueltas que cierto gobierno argentino que se arrepiente de sus decisiones y vuelve para atrás.
Voy a ser brutalmente sincera, cuando la Academia quiere ser políticamente correcta, para limpiar errores del pasado o difundir que la industria no es «tan xenofoba, racisma y misogina» como todos piensan, se nominan y entregan premios a quienes no lo merecen.
Tan políticamente correctos que todos los nominados a mejor actor son hombres blancos y la sobrevaluada actuación de Rami Malek se llevó un Oscar. Pero realmente me pregunto si lo que se valoro fue la actuación o reconocer a Freddie Mercury como artista, y como bien dijo el actor al aceptar el premio, celebrar una película «(…) sobre un inmigrante gay que vivía su vida genuinamente, sin pedir disculpas’ o tal vez por que Rami es hijo de inmigrantes de medio oriente.
El merecido premio a mejor actriz de Olivia Colman fue lo único rescatable de la noche y me pregunto por que la Reina Ana de The Favourite no la interpreto Oprah? La respuesta es simple, los blancos reinan y escriben la historia, por que la historia es racista y por que en la industria no hay lugar para un proyecto que le chupe un huevo el color de piel donde Oprah sea Reina de Inglaterra.
Pero obviamente los premios de reparto son para los negros, Regina King y Mahershala Ali ganaron justamente sus galardones, fueron los mejores en sus categorías, pero sus papeles están rezagados a secundarios cuando fácilmente Mahershala pudo ser nominado como Mejor Actor junto a Viggo Mortensen por Green Book.
De los cinco directores nominados, uno era latino y otro negro y ganó el latino, Alfonso Cuaron por un excelente trabajo con Roma. Ni una mujer nominada! Pero es lamentable y vergonzoso que Spike Lee ayer haya ganado su primer Oscar a Mejor Guion Adaptado, de ahí la euforia en el festejo con Samuel L Jackson.
Repasando las nominadas a mejor película, la evidente nominación de Black Panther simplemente por ser uno de los films mas taquilleros del 2018 por su importancia al mostrar en lugares de poder a personas negras, donde el negro no es un marginal, es un Rey y donde el conflicto por el poder de Wakanda es para liberar a los negros de la opresión de los blancos. Innecesaria nominacion, porque Black Panther ya tiene el reconocimiento de los espectadores sobre cuan importante es esta cinta para miles de pibas y pibes negros que puedan verse representados como reyes, reinas, guerreros, guerreras, super héroes y heroínas.
De las ocho nominadas, seis nos hablan de los problemas que enfrentan las minorías, en el 1700, en los sesenta, en los setenta, en los ochenta y lamentablemente como los problemas se repiten en la actualidad. El mensaje es claro y valioso, pero se siente tan forzado que solamente nominen películas por la coyuntura mas que por la película en si misma. Personalmente creo que Roma debía ganar a mejor película, pero la Academia no quería dar el mensaje equivocado a la industria ¿Cómo una película de streaming puede ganar un Oscar? Y fueron por la opción de Green Book, lo políticamente correcto. Entiendan que Green Book ahora comparte el mismo premio que La Lista de Schindler, Forrest Gump, Titanic, Slumdog Millionaire y Rocky y sinceramente no fue el mejor film del año.
Mi recomendación para Hollywood, es que acepten que son racistas, xenofobos y misoginos, y que hagan un cambio de raíz, que se le den papeles protagonicos y desafiantes a mujeres latinas, negras, asiáticas, como sucedió este año con Yalitzia Aparicio la protagonista de Roma. Que hagan lugar a proyectos como fue Get Out el año pasado, una película increíble que trata el racismo desde el terror. Es momento de que dejen de nominar y premiar para compensar años de negligencia, y comience a producir films de calidad, con historias impactantes como supieron ser en años anteriores pero inclusivos, sin importar genero, cultura u orientación sexual.