El film surcoreano que esta enloqueciendo a Hollywood, finalmente se estrena este jueves en Argentina. Muchos ya la vieron (vimos) y locura por Parasite no esta inflada por el hype.

Parásito: Que se alimenta de las sustancias que elabora un ser vivo de distinta especie, viviendo en su interior o sobre su superficie, con lo que suele causarle algún daño o enfermedad.

Así es, tal como define el diccionario, es la última película de Bong Joon Ho. Una familia (madre, padre, hijo, hija) de bajos recursos y desempleados, Los Kim, buscan changas para sobrevivir, son bastante garcas y piolas. De forma inesperada comienzan a trabajar para un familia adinerada, Los Park.

Una historia que tranquilamente podria estar situada en Argentina, pero no! sucede en Corea del Sur.

Los Kim, que viven hacinados en un subsuelo al final de una calle en un barrio careciado, donde un borracho siempre les mea la ventana y ellos le roban al wi-fi al vecino para poder contactarse con posibles oportunidades de trabajo.

Oportunamente un amigo del hijo mayor, Ki-woo, lo recomienda como tutor para una chica de clase alta, Da-hye, además de regalarle una escultura de piedra, sumamente importante y valiosa, que traerá fortuna a su familia.

Así comienza una serie de vivadas por parte de los Kim, que de a poco van tomando el control de la casa de los Park, aprovechando la inocencia y necesidad de mostrar status ante sus pares de la señora Park.

Las formas y los modos de adentrarse en la casa de los ricachones es digna de una viveza argenta pero por lo visto también de la viveza surcoreana, al igual que la gran brecha entre clases.

Los Park que viven en una casa impresionante, diseñada por un arquitecto que la había habitado hasta su fallecimiento. Tan impresionante que solamente el cuarto de Da-hye es más grande que el subsuelo de los Kim. El mismo director señala que la casa es fundamental para conocer a los Park, ellos no son cualquier familia acomodada, son cultos, interesados por el arte y sofisticados.

Es inevitable que ante semejante riqueza palpable y la ingenuidad de toda la familia, Ki-woo vea una oportunidad para que su hermana y sus padres puedan tener una salida laboral digna pero no del todo transparente. Es él quien comienza a idear el plan para introducir a toda su familia para que trabaje dentro de la casa de forma muy astuta, con total frialdad y cero remordimiento.

Siendo los Park tan fáciles de engañar, especialmente la Sra. Park, hace pensar al espectador que no son confianzudos, sino que encerrados en su burbuja de familia acomodada nunca hayan sufrido una estafa o si y tal vez no lo sepan.

Al fin y al cabo, uno termina empatizando más con los Kim pensando en que podrían afectar que una familia pobre se aproveche (oculte una parte de la verdad sobre sus identidades, no tan grave) de la inocencia de una familia, que a primera vista parece tener una posición acomodada durante mucho tiempo (que nunca paso hambre, o la falta de trabajo, educación o un techo digno), a cambio de trabajo.

Bueno, las cosas van escalando de formas inimaginables y es lo que hace Parasite tan buena. El film pasa de una comedia negra a un thriller en pocos minutos. Nada prepara al espectador para la última hora de película que te mantiene al filo del asiento, totalmente tensionado y sufriendo juntos a los protagonistas.

La pequeña ventana a la calle de subsuelo de los Kim

La brecha socio económica, como consecuencia de un sistema capitalista, es la principal temática/critica del film. Y el directo lo plasma a la perfección creando el hogar de cada familia como la antítesis del otro, siendo la casa de los Kim un subsuelo con una pequeña ventana horizontal a la altura de la calle, y la de los Park totalmente luminosa, vidriada, donde se tiene que subir del nivel de la calle para acceder a la entrada principal.

Acompañado con paletas especificas para cada hogar, siendo el subsuelo oscuro, pequeño, con ambientes mal distribuidos y sucios, tiene una tonalidad ocre. Mientras que en la casa de los Park colores son más brillantes, saturados, y siendo el jardín y los amplios ventanales el corazón de la edificación.

El tremendo ventanal de las casa de los Park.

Me impacta la posibilidad de que esta historia pueda aplicarse a cualquier país donde la desigualdad entre rico y pobres es profunda. Tan actual y cercana a nosotros por la coyuntura de nuestro país que Parasite perfectamente podría haber sido (si se la resume en un corto) un segmento dentro Relatos Salvajes de Szifron.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.